El proyecto
En el mundo rural catalán estamos asistiendo a un cambio profundo como resultado de las “múltiples crisis” del modelo socioeconómico y de desarrollo vigente que dan lugar a transformaciones socio-ecológicas evidentes y a una situación de creciente incertidumbre en términos de sostenibilidad (Demirovic et al. 2011; Brand y Wissen 2021).
Concretamente en el Pirineo catalán, que ha sido nuestra área de análisis desde hace más de veinte años (Frigolé y Roigé 2006; Vaccaro y Beltran 2010; Beltran y Vaccaro 2014; Estrada, Iglesias y Nadal 2015; Ravera et al. 2022; Fernández-Giménez et al. 2021; Del Mármol 2012, 2016) las crisis múltiples y solapadas que conyugan la emergencia climática y social en términos de crisis de sostenibilidad y de reproducción, se han hecho evidentes no solamente a nivel analítico, sino también a través de una toma de conciencia específica en la población local. Si hasta hace diez años el modelo de desarrollo turístico en zonas rurales periféricas parecía incontestado, la emergencia de los nuevos movimientos sociales surgidos en respuesta a la crisis de 2008 ha transformado también el escenario del conflicto sociopolítico en estos territorios. Así, la percepción de la crisis socio-ecológica ha forzado la apertura de un nuevo debate que se concreta en una sumatoria de proyectos no necesariamente coordinados pero que nos hablan de nuevas aspiraciones y futuros alternativos.
Las demandas de justicia social y ambiental se multiplican en la forma de movimientos sociales de contraposición a proyectos de carácter extractivista de explotación de los recursos naturales, organizados en base a agrupaciones vecinales por la defensa del territorio o a plataformas activistas más estructuradas. En el ámbito de la ganadería y la agricultura se ha extendido el reclamo en favor de una producción ecológica y de proximidad y por la creación de nuevas alianzas y redes que garanticen la soberanía alimentaria, aspirando a modelos de producción y de distribución alternativos al modelo industrial y globalizado que predomina en el actual sistema agroalimentario. Asimismo, la crisis del modelo agroalimentario y la necesidad de una apuesta por nuevas estrategias y políticas en favor de las redes agroecológicas se ha agudizado durante el confinamiento y en el contexto postpandemia (Arran de Terra 2020). El nuevo campesinado y el marco del decrecimiento se enarbolan como pancartas por un futuro viable y sostenible (Van der Ploeg 2008; Montllor 2011; Calvario 2017).
La apuesta por la economía social y solidaria se evidencia en la proliferación de cooperativas y asociaciones diversas, a menudo proclives a recuperar y reinterpretar las viejas formas de la gestión comunal como modelo de relación sostenible con el territorio y sus recursos.
El análisis de este proyecto se centrará en los debates y las luchas que se están consolidando y que se concretan en una miríada de iniciativas heterogéneas, proyectos colectivos y movimientos que se presentan como “transformadores” a los que nos referiremos como “resistencias rurales”. De esta forma, partimos de una perspectiva crítica que rechaza las teorías unificadoras para centrarse en la variedad de ensamblajes que van tomando forma impulsados por fuerzas sociales concretas y la inestabilidad con la que se fragmentan y reorganizan (Li 2009: 80).
Partimos concretamente de tres hipótesis de trabajo:
1) Grietas en el modelo de desarrollo vigente: El corpus legislativo y los mecanismos de intervención dirigidos a la protección y promoción del territorio desde una perspectiva conservacionista y desarrollista promovidos en las últimas décadas, se han demostrado insuficientes para frenar una crisis ambiental, social, económica y cultural. Se trata de modelos que han dejado entrever su fragilidad en términos de la eficacia de sus instrumentos, la dificultad para establecer modelos de desarrollo endógeno y los problemas de gobernanza que han acarreado. Consideramos que han promovido los conflictos sociales basados en la confrontación de distintas percepciones y maneras contrapuestas de entender el territorio, favoreciendo la emergencia de formas de resistencia.
2) Presión creciente sobre los ecosistemas de montaña: Las transformaciones socioeconómicas recientes (terciarización de la economía y predominio de un modelo de explotación turístico) agudizaron la competencia por los usos de la tierra derivada de las presiones de la economía del ocio y el turismo, la gentrificación (v.g. segundas residencias), los modelos de conservación de la naturaleza y la convivencia entre los viejos y los nuevos modos de explotación de recursos y materias primas. En particular, el abandono progresivo del sistema agrosilvopastoril supone un incremento de la vulnerabilidad de las zonas de alta montaña ante los desafíos del cambio climático y la pérdida de servicios ecosistémicos, así como el agravamiento de la despoblación y los procesos de abandonamiento. A partir de la defensa de los territorios y paisajes de montaña, las resistencias rurales buscan no solo la conservación del capital natural, sino también la salvaguardia de los conocimientos locales, la revitalización y regeneración social, política y económica local a partir de distintas acciones y fórmulas de compromiso ciudadano.
3) Contexto de movilización social y nuevos comunes: La consolidación de un paisaje de movilización social que responde a intereses y perspectivas compartidas permite avistar, en muchos casos, un horizonte de exploración de alternativas que tiene el potencial de promover debates sobre nuevos modelos de gobernanza, cambios de dinámicas demográficas y de innovación social, nuevos roles y perspectivas de género, nuevas prácticas de producción y hábitos de consumo que pueden, finalmente, impactar en la conservación de la biodiversidad, la sostenibilidad social y económica de la población local y la adaptación y mitigación del cambio climático.
El objetivo general del proyecto es analizar estas nuevas formas de resistencia y pensar su potencial como germen de transformaciones en el diseño de escenarios de futuro para el Pirineo catalán.
Para responder a este objetivo hemos desarrollado nuestras actividades entorno a cuatro objetivos específicos:
- OBJETIVO ESPECÍFICO 1
Mapear, identificar y clasificar las resistencias en el Pirineo catalán por medio de metodologías participativas y digitales. - OBJETIVO ESPECÍFICO 2
Analizar los factores políticos, socioeconómicos y culturales que permitieron el origen, la implementación, la consolidación y difusión de estas resistencias rurales en las últimas décadas. - OBJETIVO ESPECÍFICO 3
Explorar el potencial transformador de las resistencias y desarrollar escenarios de futuro para debatir propuestas políticas. - OBJETIVO ESPECÍFICO 4
Acompañar el proceso de diálogo interdisciplinar entre científicos/as y el colaborativo con los agentes del territorio para potenciar la comunicación y difusión de los resultados obtenidos hacia diferentes arenas (científica, digital, social).
Gracias al uso combinado de metodologías cuantitativas y cualitativas, la investigación se orientará a la recopilación de datos estadísticos, geográficos (encuestas, cartografías digitales, GIS, análisis de estadísticas) e información cualitativa (a través de entrevistas, análisis de discursos y narrativas locales, análisis de prensa, grupos focales de discusión y talleres) para aproximarnos a la magnitud de los cambios y las transformaciones de los últimos años, poniendo a dialogar estas dinámicas recientes con el análisis diacrónico.
Cada uno de los ámbitos de trabajo será analizado de manera transversal considerando tres escalas de estudio, a las que corresponderán metodologías de trabajo específicas que van de lo macro a lo micro:
- Nivel 1: Análisis exploratorio y descriptivo de las resistencias rurales en el Pirineo catalán a partir de la definición de una serie de variables (mínimo común denominador) y un mapeo colaborativo;
- Nivel 2: Definición de variables, identificación de trayectorias comunes, recopilación de las dinámicas de surgimiento y organización, la estructura de los discursos de resistencia, las formas de comunicación, así como el perfil y las articulaciones de los actores sociales participantes. Análisis de los ámbitos de cambio/transformación. Alcance explicativo y comparativo;
- Nivel 3: Selección de casos de estudio en profundidad, que identifique las lógicas de origen y desarrollo de las iniciativas en un ecosistema social y cultural más amplio y con una perspectiva de análisis diacrónica. Estudio de casos en profundidad.